En esta sección encontrarás pendientes pequeños de plata de Ley 925, delicados, elegantes y ligeros. Son piezas únicas realizadas a mano con el mayor amor y mimo posible. En nuestro taller nos encanta la belleza y energía que reflejan la piedras semipreciosas, por lo que las verás en muchas de nuestras joyas.
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Origen de los pendientes pequeños
El origen de los pendientes es algo incierto. Se conocen muchas posibles versiones de donde se crearon. Se puede hablar por culturas, por épocas, y es que es una practica que se viene haciendo desde tiempos muy antiguos.
Hubo un tiempo en el que los pendientes eran solo de uso masculino, lo cual es ahora impensable. También en algún momento fueron prohibidos por ciertas religiones. Y es que estamos claros que sea cual sea la razón los aretes, pendientes o zarcillos como los llaman en distintas partes son un adorno que en la mayoría de los casos requiere la perforación del oído.
La perforación del oído es una de las formas más antiguas conocidas de modificación corporal. Y se conoce que esta practicas se realiza desde tiempos antiguos. Muchas referencias y fuentes escritas en el arte provienen de diferentes culturas de todo el mundo que se remontan a la historia temprana.
Los pendientes de aro de oro, plata y bronce prevalecieron en la civilización minoica y se pueden ver ejemplos en la isla egéa de Santorini Grecia Es importante mencionar que los pendientes de aro con colgantes cónicos estaban de moda durante el último Minoan y tempranos tempranos micénicos de la edad de bronce Grecia.
Los antiguos romanos heredadas de la cultura griega como un tipo de pendiente pendiente que se hizo en la forma de una piedra grande en Una configuración de oro de la que se suspendió otras tres piedras preciosas o perlas. Estos pendientes, de joyería romana, son los aparentes precursores del Renacimiento.
Y aunque existen innumerable evidencias que los pendientes en forma de aro fueron usados por mujeres, también se conoce que los hombres lo usaban. En la antigua Persia, se crearon tallas que mostraban a soldados con un solo pendiente.
Consejos para llevar zarcillos pequeños
Los pendientes pequeños siempre vienen bien para cualquier ocasión. Son los más usados para el día a día, porque dependiendo de la forma pueden realzar tu belleza sin llamar demasiado la atención. Aunque hay aretes pequeños que pueden llegar a ser bastante vistosos.
Al ser usados a diario, por lo general no requieren mirar grandes parámetros de atuendo.
Son muy recomendables para el trabajo. Debido a que pueden llegar a ser muy discretos y si se escogen en colores neutros cuadran a la perfección con una estética más formal.
Los pendientes pequeños por lo general quedan bien a todo tipo de rostro, sin embargo suelen favorecen a personas con rostro del tipo cuadrado, ya que el rostro consigue entrar en armonía con el cuello. Los zarcillos pequeños y de forma redondeada hacen que las facciones del rostro se suavicen en gran medida.
En cambio deben tener más cuidado aquellas chicas que tienen rostro redondo, ya que los pendientes pequeños y además redondeados no les favorecen para nada. En este caso, lo que necesitan es alargar el rostro para dar una sensación de estilismo, algo que no se consigue con los pendientes pequeños.
También hay otras consideraciones que tener en cuenta como el aspecto del cuello. Los aretes pequeños son perfectos para cuellos más cortos y chicas bajitas. Si logras compaginar los rasgos físicos y unirlos con los complementos ideales armonizan todo estupendamente y logran un look envidiable.
Que los pendientes sean pequeños permiten además ponerse otras piezas que necesiten tener mayor protagonismo. Pueden ser otros pendientes en la misma oreja, un collar muy vistoso o algún complemente impactante que quieras combinar con tu feed.